Las tarariras grandes como las tornasoles o azules y las amazónicas son un gran desafío para un pescador de mosca. Una vez prendidas dan una buena pelea que sorprende por el largo de sus corridas y la potencia de los saltos.
Ambas especies prefieren mayormente ríos y en estos casi siempre encontraremos mas en las zonas rocosas.
A las azules o tornasoles las tenemos mas cerca ya que hay buenas poblaciones en muchos ríos del Uruguay, especialmente afluentes del río Negro, Queguay y Arapey. También existen en nuestras aguas del delta pero en un número evidentemente menor ya que rara vez las vemos.
El comportamiento de las tarariras azules es bien diferente al de nuestras laguneras o el de las grandes tarariras amazónicas ya que prefieren tomar moscas bajo la superficie, especialmente streamers cortos, de buen cuerpo y movimiento.
No son fáciles de clavar y suelen desprenderse de las moscas con mucha frecuencia por lo que estamos experimentando con moscas articuladas con el anzuelo atrás. Pareciera que el anzuelo atrasado tiene mas chances de afirmarse en alguna parte blanda del interior de la boca.
Los colores oscuros en los streamers como las combinaciones del negro con violeta o rojo son muy efectivas con las tarariras azules y como suelen vivir en zonas de mucha piedra es conveniente que los streamers lleven un buen anti enganche para el cual el alambre de titanio ha resultado insuperable hasta el momento por ser extremadamente liviano y muy resistente a deformarse soportando muchos piques sin perder efectividad.
La mosca va unida a un cable de acero de 26 a 30 libras de color apagado y muy flexible para que no le reste vida a la mosca cuando la movemos en el agua. Como leader hemos usado con muy buenos resultados uno hecho de dos tramos de fluorocarbon, un metro y medio de 35 libras con una puntera de un metro de 20 o 25 libras. El fluorocarbon se hunde mejor que el nylon y es mas resistente entre las piedras.
En muchos ambientes las azules superan holgadamente los cinco kilos, con ejemplares que pasan los siete y pueden llegar a superar los diez kilos. Por esto no podemos usar equipos demasiado livianos siendo un equipo 7 lo mínimo que deberíamos usar si queremos dominar a una grande entre las piedras cuando decide hacer todo lo posible por cortarnos.
El reel para esta pesca es una pieza importante ya que son tarariras que suelen efectuar corridas largas de inusitada potencia. Solo un buen freno a disco potente y parejo puede dominarlas durante una pelea que no suele ser corta. Lo normal es que una vez prendidas realicen varias corridas largas con algún salto intercalado y nunca las tendremos vencidas hasta que logremos plancharlas en la orilla. Cuando las prendemos en correntada tenemos que prepararnos a una buena lucha donde si perdemos la concentración por un segundo la tararira buscará piedras o palos donde zafar de la mosca. Estamos acostumbrados a las laguneras que saltan mucho pero no corren demasiado pero hemos visto azules y amazónicas correr sin parar hasta sacar muchos metros de backing, o arrastrar el bote de un lado al otro del cauce.
Las amazónicas a diferencia de las tornasoles toman muy bien los poppers que deben llevar los mejores anzuelos posibles ya que tampoco son fáciles de clavar. Como en las azules el maxilar inferior es muy ancho y duro y si el anzuelo se apoya contra el maxilar es muy posible que se suelte cuando la tararira abre la boca, por eso usar anzuelos que queden retrasados o largos aumenta la chance de que el anzuelo encuentre la legua u otra parte blanda.
El popper de foam sin demasiados adornos para que sea liviano es el mejor en la selva ya que los de pelo son rápidamente degradados por la ácidas aguas amazónicas. El color chartreuse siempre ha sido el mas efectivo al punto de que mayormente solo llevamos poppers de ese color en anzuelos que van del 1/0 al 3/0. Como cola del popper un buen mechón de bucktail es mas que suficiente y durable. Es preferible el bucktail a los sintéticos, que pesan mucho en la punta y se enredan perdiendo atractivo.
Nuestra caña preferida para tornasoles y amazónicas es la número 8, eligiendo un modelo de acción rápida y liviano que pueda lanzar una línea de flote número 9. Muchos lances son rápidos y cortos, con solo la mitad del torpedo de la línea afuera, por eso un número mas de línea es necesario para tener una carga adecuada en la puntera que permita formar un loop correcto y llevar la mosca con certeza al blanco.
A pesar de que son tarariras, las grandes tienen muchos años de vida y no van a aceptar un mal lance, tenemos que colocar la mosca cerca con suavidad para no asustarlas, por lo que el balance del equipo es crucial.
Muchas veces pescamos las tornasoles con clima bastante fresco por lo que en este caso no empleamos líneas tropicales que estarían muy duras y en cambio usamos líneas de stelhead o bass, adecuadas para lanzar bien moscas pesadas o articuladas. Con las amazónicas cambia radicalmente el clima y solemos enfrentar los calores mas violentos con temperaturas bien por encima de los 40 grados. En este caso solo las líneas mas tropicales como las de Scientific Anglers funcionan, usando mayormente las que son Tropic Core que no se ablandan aún en los momentos de mas calor o sobre la chapa de aluminio caliente de los botes donde todas las otras líneas fallan siempre, ablandándose y enroscándose como si estuvieran vivas. Una línea que se ablanda pronto se pela y resulta inservible en los trópicos.